¿DÓNDE CELEBRAR Y DISFRUTAR LA NOCHE DE SAN JUAN? Viajes InterRías te lo cuenta
La Verbena o noche de San Juan es una fecha señalada en el calendario que se vive con intensidad en nuestro país. De norte a sur, encontramos pueblos y ciudades que dan la bienvenida al verano con el fuego y el agua como protagonistas.
Pero antes de citar algunos de esos lugares en los que esta noche es especial, tenemos que conocer los orígenes de esta fiesta.
¿Por qué celebramos San Juan?
Si echamos la vista atrás, los paganos comenzaron a celebrar la entrada del solsticio de verano que simbolizaba el dejar el invierno atrás y todas las adversidades relacionadas con esta época más fría en la que el alimento era más escaso. Para ello, encendían hogueras con las que se pedía más fuerza al sol.
En la Biblia, se refleja que la medianoche del 23 al 24 de junio nació San Juan Bautista y en su honor Zacarías mandó encender una hoguera que anunciaba el nacimiento de su hijo.
Hoy en día, las hogueras en las playas de nuestro país son un símbolo; sirven para “quemar todo lo malo del año”.
Pero esta noche mágica, no solo es fiesta y diversión, para asegurar la buena suerte durante todo el año, se deben cumplir unas ritos.
Ritos de San Juan
Saltar las hogueras
Las playas de nuestra geografía se llenan de hogueras que los más atrevidos saltan para purificarse y eliminar los malos espíritus que los rodean.
Mojar los pies en el mar
Las creencias populares aseguran que el 24 de junio toda el agua es pura. Por eso, una tradición es bañarse en el agua del mar al llegar la medianoche. Aunque hay diversas creencias según el lugar donde lo celebres; algunos dicen que hay que entrar de espaldas, otros que hay que saltar 7 o 9 olas o incluso sumergirse por completo para poder purificarte.
Lavar la cara
Además de mojarte o bañarte en el mar, hay quien alarga el conjuro para conseguir además belleza y salud lavando la cara pasada la medianoche con el agua del mar.
En Galicia, la tradición manda dejar en remojo diferentes plantas aromáticas y lavarse con esta agua la cara al día siguiente.
Quemar los malos augurios
Otra tradición de esta noche mágica es escribir en un papel los deseos para ese año y echarlos a la hoguera. El fuego ayuda a que se cumplan y a la vez hace que los malos augurios se consuman y se conviertan en cenizas.
Ahora que ya conocemos los orígenes de esta celebración y los ritos que debemos cumplir, podemos decidir en qué punto de nuestra geografía disfrutar esta noche mágica.
Galicia. “En San Xoán, meigas e bruxas fuxirán”.
Como no podía ser de otra forma, nuestro primer destino es Galicia. En nuestra Comunidad, la noche de San Juan no es sólo una noche de tradición y fuego, sino que está muy asociada a
leyendas que cuentan que la madrugada del 23 al 24 de junio el más allá se unifica al mundo terrenal y es por eso que las hogueras se encienden a partir de la medianoche.
Aunque es difícil elegir destino, “A noite meiga” en Coruña es una de las celebraciones más conocidas e incluso declarada de Interés turístico internacional.
La playa de Orzán se llena de hogueras durante toda la noche para dar la bienvenida al verano y librarnos de los malos espíritus. Los asistentes disfrutan alrededor del fuego de sardinas y cachelos.
Cataluña.
En toda Cataluña se celebran “revetlles” (verbenas) de San Juan, pero queremos destacar dos puntos en los que vivir la noche más corta del año intensamente.
Después de ver el espectáculo de fuego que hacen los Diables por el centro de la ciudad condal, la mayor parte de la gente se desplaza a las playas para seguir disfrutando de la noche. Otros, sin embargo, prefieren mezclarse en las verbenas populares que se celebran en barrios como Gracia o Sants. Lo que sin duda no puede faltar ni en las playas ni en los barrios son el cava y la coca de Sant Joan.
El segundo punto geográfico es Tarragona, que celebra la noche del solsticio de verano por todo lo alto con verbenas en sus barrios, cenas bajo las estrellas y petardos hasta bien entrada la noche.
La tradición dicta que las hogueras se encienden con la “flama del Canigó”, un fuego que se enciende en la cima de la montaña del Canigó en el Pirineo. Los Diables bailan durante la noche alrededor del fuego y durante el día los castellers levantan castillos humanos.
Menorca. Festes de Sant Joan en Ciutadella
En Ciutadella, San Juan coincide con la celebración de su patrón y al fuego, las hogueras y la pirotecnia,
se suman los caballos, los verdaderos protagonistas que toman el centro de la ciudad. Los “caixers (jinetes)
los hacen saltar entre la gente simbolizando el poderío y la nobleza. La bebida típica esta noche es la “pomada”,
a base de gin menorquín y limonada.
Málaga. Quema de los “juás”.
La ciudad entera se vuelca en la celebración del solsticio de verano. Además de los fuegos artificiales,
se asan espetos de sardinas en la playa, se degustan brevas y se queman los “Juás”, unos muñecos
de trapo que se lanzan a la hoguera.
Asturias. Nueche de San Xuan en Mieres.
Todas las fuentes del centro urbano de Mieres se enraman como si fueran una ofrenda floral a los dioses celtas y
cuando cae la noche se hace la “cargüena”: una escenificación de cómo se acarreaba antiguamente la leña y los
trapos viejos para quemar en la hoguera de la Plaza del Ayuntamiento.
En cuanto llega la medianoche, la gente baila en círculos alrededor del fuego agarrada de los meñiques mientras
se canta el tema popular “Hay un galán en esta villa”.
Alicante. Quema de monumentos.
Las fiestas de San Juan en Alicante también son de Interés Turístico Internacional.
Para dar la bienvenida al verano, las calles se llenan de hogueras y monumentos que
serán pasto de las llamas. El espectáculo pirotécnico se lanza desde el cerro del
monte Benacantil.
Tenerife. “San Juanito”.
En Punta Hidalgo, antes de que oscurezca, una comitiva recoge la figura del santo y la lleva
a la orilla del mar en el Güigo.
Al son de melodías populares, cuando se pone el sol, se encienden las hogueras y se disfruta
de la buena compañía, el vino y la comida.
El año pasado estuve en noche de San Juan en Tenerife, y fue realmente especial, mágica.